Un momento en un río: infinitas interpretaciones… Es el concepto de la muestra de Patricia Claro, que abre sus puertas al público el 12 de noviembre.
El agua como un todo. Como el principio y el fin de la existencia. Bajo esas premisas, Patricia Claro ha delineado su trabajo artístico que hoy confluye en “Aguagramas”, una exposición que a través de 20 obras, le da voz, sentido e imagen al agua.
Usando técnicas como la fotografía, óleo, videos y grabados, la artista explora un mundo en constante evolución: “El agua no tiene color, no tiene forma; sin embargo la distorsión del paisaje que la rodea está en permanente cambio, generando imágenes irrepetibles y llenas de significado”.
Es por eso que la artista prefiere las aguas claras, las que llenas de generosidad entregan reflejos cargados de historia, interpretables por cada espectador. Es en esas imágenes en las que descubrió los “aguagramas” ideogramas del agua, capaces de revivir lenguajes milenarios, mezclando técnicas, tecnologías y significados.
Usando los ríos como fuente de inspiración, “Aguagramas” es una exposición situada en el siglo XXI, que pone al servicio de la sensibilidad artística, una serie de recursos, capaces de ampliar el catálogo natural. Por eso en este recorrido, Patricia Claro nos muestra un Río Bueno, como probablemente nunca lo hemos visto. Un Río Negro, capaz de reflejar una selva más allá de la postal.
Junto a estos segundos únicos que la artista logra plasmar en sus obras, “Aguagramas” nos invita a reflexionar en torno al rol del agua en nuestras vidas, desde lo individual y lo colectivo. ¿Qué tan conscientes somos? A ojos de Patricia Claro muy poco “en algún momento olvidamos el carácter sacro y ancestral de este elemento, convirtiéndolo en un bien usufructuable”.
Valorar el agua hoy es crítico y el agotamiento de reservas de agua dulce una realidad. La esperanza de vincularnos con ella de otra manera refleja la pasión de Patricia Claro en cada obra “el agua es un elemento que no se puede reemplazar, que tiene una carga histórica, mensajes, instantes y reflejos, sobre todo reflejos que un dominador es incapaz de ver”.
Patricia Claro nació en Santiago, Chile (1960). Estudió Artes Visuales (2006) y Diseño (1983) en la Universidad Católica de Chile. Su trabajo multidisciplinario está relacionado con la naturaleza y el comportamiento de las aguas claras del planeta, colocando a este recurso como el objeto de su creación. Ha realizado exposiciones individuales en Chile, Brasil y Estados Unidos; ha participado en Bienales como “Bienal Curitiba” (2017-2019) y “Bienal del Fin del Mundo”, Valparaíso (2016) ambas curadas por Massimo Scaringella, e “Intemperie”, Ushuaia, (2009) curada por Alfons Hug. Su trabajo ha sido incluido en Fresh Paint (2012), un libro editado por Selene Wendt, The Stenersen Museum, Oslo. Claro obtuvo la Beca Fondart del gobierno de Chile (2007), con el proyecto “Paisaje Final”, Patagonia, Chile.